Mejora estética
Los años no pasaban en vano para el excelente y veterano campo de Bernhard von Limburger. Había perdido todo su brillo y, además, era imposible mantener los greens en el estado deseado a pesar de aplicar todas las medidas de mantenimiento habidas y por haber. Tras aproximadamente un año de fase de planificación y dos años de obras, el campo ha sido rediseñado y saneado por completo. Lo mismo se hizo con los tees y los bunkers. Más allá de la renovación en sí, se decidió adaptar el campo a las nuevas formas de jugar y a las distancias de golpeo actuales. Allá donde fue posible el campo se alargó pensando en los jugadores de mayor nivel.
Optimización de juego
En esencia, se mantuvo el estilo de los «greens de Limburger», ligeramente elevados y con flancos inclinados. Varios greens tan solo se ampliaron para poder ofrecer más posiciones de bandera. Estos se consideran, por tanto, como especialmente difíciles y requieren un enfoque bien meditado. Se retiraron muchos árboles y se añadieron tees más variables –pensando en hacer más accesible para las jugadoras femeninas este campo demasiado largo–. Además, todos los fairwaybunkers se trasladaron y se construyeron algunos nuevos para añadir estrategia, el sistema de riego se renovó y el césped de las calles se retiró para reemplazarlo por variedades nuevas. Así es como uno de los clubes de golf más célebres de Alemania se ha hecho con un campo a su altura.
Año de construcción